Cerca del 88% de las personas busca información en internet antes de
comprar un producto. Es por esto que las empresas poco a poco han
implementado el conocido marketing digital
Pero ¿lo estarán haciendo bien?
Una
de las tantas ventajas de internet, es que se ha democratizado la
publicidad. Antiguamente, a ésta accedían aquellas marcas que contaban
con un gran presupuesto, con el cual costeaban los altos precios de los
medios de comunicación tradicionales.
Sin embargo,
con la llegada de internet y las redes sociales, la publicidad –y la
información en general- se han democratizado y están al alcance de un
clic. Ya no hace falta ir a “vitrinear” para comprar un producto, sólo
basta entrar a algún buscador y toda la información necesaria aparecerá
en la pantalla.
Es así como funciona el marketing digital: las empresas
-grandes o pequeñas- tienen acceso a posicionarse en la red. No
obstante, aún predomina el concepto de publicidad tradicional en el cual
se selecciona el medio de acuerdo al público objetivo y se paga por el
espacio publicitario.
En el caso de internet, pagar
por un banner en una página muy visitada donde se cree que están los
posibles clientes no es marketing digital. Aquí se está aplicando la
misma modalidad de publicidad tradicional, sólo que en una sitio web.
De esta forma, las empresas deben invertir en campañas que
apunten al público automáticamente. Si una persona es fan de los
zapatos, que la publicidad de la empresa aparezca en blogs y páginas de
zapatos. Ésta es una metodología viable y efectiva ya que, otra de las
ventajas de internet es que el consumo es medible, así como la llegada
de la información al público. La publicidad online es una apuesta segura
y empresas como Google la ponen a disposición de la gente para ser
aplicada a través del marketing digital.
No
obstante, en Chile la inversión en marketing digital se mantiene bajo el
10%, mientras que en Inglaterra -por ejemplo- las empresas invierten
anualmente un promedio de US$130 por usuario, es decir, cerca del 35%
de la inversión total en publicidad.
Los clientes hoy en día son más independientes y tienden a
investigar antes de comprar, por ende, también a comparar. Es por esto
que una buena estrategia publicitaria debe prestar servicios asequibles,
información instantánea para el cliente que la busca y, en lo posible,
tener contacto directo, empresa-cliente, mediante las redes sociales.
Estas a su vez, deben generar un tráfico directo a la página web de la
empresa de manera que los clientes puedan ver los productos que ofrece.
El
marketing digital no sólo puede aumentar las ventas, sino que también
ayudará al posicionamiento de la empresa en el mercado. Ya no basta con
utilizar herramientas digitales, hay que aprender a hacer marketing
digital y todo lo que éste conlleva: segmentación, información al
alcance de un clic, posicionamiento en la web, entre otros.
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